No es extraño encontrarnos en la publicidad de muchas cervezas la referencia que cumplen con la Ley de Pureza de 1516, por la que se establecía que los ingredientes para la elaboración de la cerveza tienen que ser: agua, lúpulo y cebada. Esta ley fue decretada por el Duque Guillermo IV de Baviera el 23 de Abril de 1516. Pero vamos a profundizar un poco más en ella, empezando por su traducción para acercarnos un poco más a su contenido.
Ordenamos que en todo el Principado de Baviera, tanto en el campo como en las ciudades que no tengan una ordenanza para ello, de Michaeli (San Miguel, 29 de Septiembre) a Georgi (San Jorge, 23 de Abril) un Mass (1.069 litros) o un Kopf (vaso con forma de media esfera que no llega al litro) de cerveza será vendida por más de 2 peniques y el Hopf por no más de 3 heller (medio penique). Si no se trata de cerveza negra, no se debe vender bajo ningún concepto por más de un penique el litro. Además, es nuestro deseo enfatizar que en el futuro, en todas las ciudades, mercados y en el campo, los únicos ingredientes usados para la elaboración de cerveza deberán ser Cebada, Lúpulo y Agua. Quienquiera que conociéndola no obedeciera o ignorara esta ordenanza, será castigado por las autoridades, confiscando dichos barriles de cerveza, sin falta. Si un dueño de una taberna compra a una fábrica de cerveza de nuestras ciudades, mercados o del campo uno, dos o tres cubos de cervezas (contiene 60 Mass) y se lo sirve a la gente del campo, entonces solo a él estará permitido y no prohibido el vender el litro o el Kopf de cerveza por un héller más de lo que se prescribe más arriba.
En una primera lectura observamos que lo que la ley pretendía era regular la venta y por supuesto mejorar la calidad de la cerveza, que en esa época se podía elaborar con cualquier tipo de producto. Pero la ley también se creó para que el centeno y el trigo se dejaran de utilizar para la elaboración de cerveza y se usaran para la fabricación del pan. Y tenemos que tener en cuenta que el monopolio de la cebada estaba en manos del Duque de Baviera.
Actualmente como sabéis sigue usándose, aunque desde hace unos años también está en boga la agricultura biodinámica y la cerveza ecológica, representada por empresas como la Brauerei Pinkus Müller , Neumarkter Lammsbräu o Reidenburger Brauhaus.
La Reinhetsgebot nunca pretendió mejorar la calidad de la cerveza, éso es uno de los mitos que rodean a la ley. La elaboración de cerveza era una actividad bastante regulada ya antes de 1516 y la calidad estaba más o menos asegurada. Si una cerveza no era lo suficientemente buena, la gente iba a otra cervecería.
ResponderEliminarGracias Pivní por tus aclaraciones, aconsejo a todos entrar en el enlace "los mitos" de tu blog... lastima que no lo hubiera leido antes.
ResponderEliminarMe alegro que te haya sido útil.
ResponderEliminarPara mí, hoy por hoy, la Reinheitsgebot no es más que una frase vacía de marketing.